sábado, 24 de septiembre de 2016

menguando, ando

De Luna Menguante,ando.
Hechicera Nocturna, me complazco en cortar amarras.
No tengo miedo de emprender el Vuelo, pues la Profundidad de mis Alas me lleva alto.De Luna Menguante, ando.
EspirAlada la sombra me habla.
Y yo danzo con escoba en mano,
haciendo la Magia, LimpiAndo.
De Luna Menguante ando.
Cantando los Versos de antaño,
tejiendo memorias, sanAndo.
Abriendo la Tierra Negra,
preparando el Nido,
desmalezAndo.
aullAndo, cantAndo, creAndo, soltAndo, cortAndo... Menguando... ando... 

versos de luna madre

Tejiendo estoy con Hilo de Luna
el Canto por el cual voy a abazArte...
AcunAndo como una Madre,
Del pecho me brotan poemas,
para dArte.
Así Soy. CreAdora.
Respiro en tu Piel y me mojo de dicha.
La Leche blanca me sumerge en el Recuerdo.
Y tus ojos que resplandecen como solES,
me eclipsan hacia ese Espejo que
in-verso murmura los silencios que me guardé.
De otro lado, naSiente me muevo.
Hilo tras hilo tejo y destejo.
Pero red-Honda Soy.
Me muevo de LUNA en LUNA,
En todos los plANETas soy la Hija de la Noche.
La boca oscura se me abre porque giro con estrella,
y no hay mundo que se resista a los cuentos
de una Mujer enAMORhada...


domingo, 19 de julio de 2015

Ser Mujer Invierno

Silenciosa y profunda, detenida en la cúspide de su sentir,
La Mujer Invierno me mira.
Su Mirada de tiempo blanco abre las puertas que yo mantenía cerradas.
Primero no quiero mirar pues me aterra la oscuridad que asoma como boca de lobo hambriento.
La Mujer Invierno me ofrece su mano. Blanca y suave me enrosca sus dedos como raíces ceñidas a la Tierra.

Entonces abro un ojo.
El túnel me parece intransitable.
Sollozo.
La Mujer Invierno me ofrece sus pies.
Callosos y resueltos, su pisada firme hace temblar mi ilusión.
Entonces abro otro ojo.
Mi mirada alumbra el abismo que me seduce con su secreto.
Me quedo quieta.
Detrás de mí llevo tejida la Vida que conozco. Algunas hebras están dañadas y duelen sus fibras en mis entrañas.
No me atrevo a dejarlas.
La Mujer Invierno sigue parada, sus cabellos ligeros se arrebatan ante la ráfaga de mi incertidumbre.
De pronto me dice ¡SALTA!
La Mujer Invierno no sabe que estoy atada.
¡SALTA!...
Mi Corazón se agita, la Sangre se acelera, las Lágrimas se agolpan en mi cara...
¡SALTA!
Detrás de mí, los hilos que tejieron mi Vida parecen amarras.
¡SALTA!
La Mujer Invierno va desnuda, nada lleva, nada carga...
¡SALTA!
Un instante y basta. La Eternidad se hace camino.
Voy al encuentro de mi misma, dejando ir lo que he sido.
Se deshacen los nudos de mis tramas...
En Silencio voy navegando hacia el vacío.
Un instante me basta, ese paso hacia la nada...
Ahora parece que Sonrío...
Viajera de mi misma, la oscuridad me abraza.
En Ella van quemándose con Fuego de Verdad, las heridas, los miedos, las trabas.
Yo sólo sé que duele y que a medida que duele, pasa.
Yo sólo sé que la caída poco a poco me levanta.
El desgarro abre tierra nueva, semilla durmiente se prepara para naSER.
Y la Mujer Invierno me abraza.
Maestra del desapego, sus huellas se deshacen en la fría noche que camino.
Puedo Sonreír. Morir y Reír puedo.
Son los acordes Sagrados del Gran Misterio.
Oscuridad y Sombra son pasaje.
La Gran Mujer Invierno es Guía y Protectora.
Su barca es mi cuerpo.
Voy a lo
Profundo y ya no temo.

jueves, 8 de enero de 2015

De Momentos: La Vida

Para mi Compañero, 
viajero andante de los infinitos multiversos...



Amo lo que Somos en cada despertar.
En cada silencio que dibuja su horizonte en el brillo obtuso de la ventana.
En cada palabra que vuela traviesa a desordenar los ritmos de lo invisible.

Amo lo que somos puertas adentro.
En el silbido tibio de la tetera humeante,
En el chasquido teatral del Abuelo Fuego
En la locura de la sábana que metros abajo naufraga en el mar de los deseos.

Amo lo que somos.
En cada sonrisa que al anunciar su estallido alumbra los cuartos llenándolos de ecos.
En cada lágrima que, viva de temblores se entrega a la aventura de atravesar los duelos.

Amo lo que Somos.
Esa amalgama de versos que apilados en la memoria del tiempo va dando vida a un nuevo libro.
Ese cántaro de sueños que ahuecado hacia el centro se abisma hasta los secretos del Gran Misterio.

Amo lo que Somos.
Sin cirugías que disimulen la silueta oscura y amarga que a veces deambula tragándolo todo.

Amo lo que Somos.

Cuando la Luna Crece y el lobo aúlla, amo lo que Somos.
Cuando la Luna muere y el lobo gime, amo lo que Somos.
Cuando sangramos de la herida vieja, amo lo que somos.
Cuando dormimos, cuando Despertamos.

Cuando las burbujas se elevan en el mar de la emoción
Y las canciones acurrucan la semilla de los tiempos,
Amo lo que Somos.

Y en esta tarde en que el mapa se abre 
y los caminos se disuelven
en el susurro vacío del Universo,


Amo lo que a tientas y expandidos a los gloriosos páramos del infinito, 
Eternamente Somos.

Arte de F. Rassouli


domingo, 23 de noviembre de 2014

Luz y Sombra

Todos somos Luz y Sombra… Creados como una perfecta obra de arte, nuestra forma sobresale en la inmensidad de la luz gracias a la pincelada negra que nos delinea. Nos han dicho que la luz es buena y que la sombra es mala, así como aparentemente el Alma es buena y la personalidad díscola, ególatra y por lo tanto mala. Pero en esta aventura humana, sin duda la personalidad es junto con nuestro cuerpo físico el medio a través del cual nos realizamos como Seres Espirituales... el medio a través del cual el Alma realiza su Sagrado Propósito… 

Vista así, nuestra personalidad, llena de condicionamientos e identificaciones, y nuestro cuerpo físico, a veces enfermo y limitado, se vuelven infinitamente Sagrados. Mucho nos han dicho de la importancia de alinear el ego al Corazón y de trascender el deseo del cuerpo y la identificación con él. Y seguro que en el arte de la manifestación es el equilibrio el que nos da las claves de la belleza y la armonía. Es por eso que, Honrando todo lo que Somos, es posible mirar esta premisa desde otro punto y re-cordar que el Alma ama la personalidad que ha escogido y el cuerpo que ha elegido para atravesar La Existencia en este plano, en este Aquí y Ahora. 

El Alma, plena de Sabiduría y en Conexión profunda con todo lo que Es, conoce y re-conoce en las particularidades del cuerpo y la personalidad, los atributos que nos llevarán a evolucionar  y a concretar nuestro Propósito Divino… Por eso una persona anclada a su Corazón, es decir, aquella que sabe escuchar la voz de su Alma, sabe a ciencia cierta que el cuerpo también es un maestro y la personalidad una aliada. Sabe que la enfermedad es un camino a la sanación y al conocimiento profundo y que el cuerpo físico es un templo y a la vez un mapa de las memorias y vivencias que tejen nuestro sendero de Mujeres y Hombres…

Por eso hoy, una vez podemos elegir honrar a DiosDiosa a través de lo que Somos en esta vida terrena, una Mujer, un Hombre con Luz y Sombra, un Ser Humano, con caídas, con dolores y con un potencial inmenso para transformar todo tropiezo en destellos que nos guíen hacia lo infinito… Sí, la sombra es la forma que contiene una infinidad de Luz en la que se contornea la Divinidad… Y en ella también se guardan los secretos que nos conducen al encuentro de todo lo que Somos… 

En Amor Infinito,

Raquel 
Kahori Maki


sábado, 11 de octubre de 2014

Sanando la Matriz de la Vida: El Útero y nuestro linaje

Es nuestro Útero un refugio y un portal. La antesala de la vida física, y el Templo de nuestra Creatividad Divina Femenina.

Desde el Útero venimos. La matriz de la Vida se manifiesta en esa sagrada figura triangular que apunta finamente hacia nuestro Yoni y hacia la Tierra.

Desde el  Útero las mujeres nacemos a la doble vida: a la física- exterior y a la psíquica-interior. Volver al Útero es unificar esa doble manifestación de la personalidad y el alma, es adentrarnos en los secretos de nuestra existencia como Mujeres y es honrar la Fuente misma de Todo lo que Es.

A continuación, les comparto un hermoso ritual que nos permitirá ir sanando nuestras Memorias, nuestro Linaje, nuestros vínculos, nuestra Energía Femenina Divina.  


       
Ritual: Abrazando el Útero de nuestra Madre

No es necesario que tu Madre esté físicamente presente. Pero sí lo está es una preciosa forma de honrar la Vida y Sanar tus Memorias y elevar tu Energía Femenina a lo Divino.

Para ello, puedes preparar un espacio de manera especial, utilizar algún aroma relajante y una luz tenue, elevar un altar, encender una vela que te recuerde el Fuego Divino que nos alumbró.

Visualiza y siente la Presencia de tu Madre, reconociendo en ella la cuna de tu existencia, recordando que fue en ese cuerpo que el tuyo se gestó. Visualiza sus ojos, reconócela Mujer y dile "Madre". Puede que tardes algún momento en reconocer en ella la primera cuna que te meció como ser humana. Tómate tu tiempo.  

Permite luego a tu Corazón expresar su Amor y Gratitud a la Vida a través de un abrazo al vientre de tu Madre. Re-conociendo a tu madre, mirando sus ojos, la tomamos de las manos, acariciándolas con dulzura… 

Ahora visualiza el vientre de tu Madre, y disponte a abrazarlo. Ese espacio que cobijó tu gestación es un espacio sagrado. Ahí se forjó la Vida que hoy sostienes día a día.  Si alguna emoción se manifiesta, ya sea de placer o no, obsérvala, permite que se manifiesta sin juzgarla, respira profundo y siente los latidos de tu Corazón, siente cómo la Vida Late en tu Corazón y en el útero de tu Madre.  Disfruta de este momento. Permite si así lo sientes que todo el Amor y la Gratitud que sientes fluya al útero de tu madre. Descansa un momento ahí. 

Luego, manifestaremos la intención de que todo el Amor y Gratitud que sentimos por la Vida viaje a través del útero de tu madre hacia los úteros de tus abuelas, de la madres de tu abuelas, y así hasta el origen en el útero de la Diosa…. 

En el Corazón Uterino de la Madre volvemos a incubar la Vida Sagrada en el Corazón. Nos nutrimos, recibimos el amor puro e incondicional de la Gran Madre Interior. Podemos descansar en ese amor y esa Paz el tiempo que sintamos sea necesario. Una vez que volvemos al ahora sabemos que esa Madre Interior nos cobija eternamente en su regazo. Volvemos a tomar las manos de nuestra Madre y Viéndola a los Ojos le decimos con la Fuerza del Corazón (en silencio o  viva Voz):


Amada Madre te Amo y Honro infinitamente, agradezco la Vida que se gesta en Ti y la Vida que te gestó. Que el Amor y la Luz sanen nuestros cuerpos y purifiquen nuestras raíces”.

Nos tomamos un tiempo, y cuando los sintamos, respiramos profundamente, suavemente, y con infinita gratitud, volvemos al Ahora sintiendo nuestro Cuerpo Físico renovado, luminoso, listo para seguir adelante en esta travesía de la Vida.


Desconozco el nombre de los o las creadoras de las imágenes... Honramos su trabajo y agradecemos me cuenten si l@ conocen.

miércoles, 30 de abril de 2014

A través de los Mundos

La Noche de Samhain

(30 de Abril-1 de Mayo, Hemisferio Sur)


Dentro de la bella e infinita sabiduría que nos legaron los antiguos Celtas, la Fiesta de Samhain (que en el Norte celebran el 31 de octubre y que en nuestro Sur conmemoramos a partir del crepúsculo del 30 de abril y el día 1 de mayo), es una de las más significativas celebraciones en la Rueda de los Ciclos de la Vida en la Tierra. La despedida del Sol nos augura la entrada del frío y oscuro invierno y nos alienta a sumergirnos en las sombras de nuestra propia existencia. Es en esta Senda que se adentra en lo profundo donde podemos sembrar los frutos del mañana, es donde podemos escarbar para limpiar, es donde podemos ofrendar y a su vez pedir por los ciclos que se inician. Sin embargo, una de las bendiciones más grande que traen estos tiempos de retiro, es la oportunidad de ahondar en la maestría de nuestros antepasados. Se dice que en la noche de Samhain los velos que nos separan del Mundo invisible se disuelven, de tal manera que la distancia que en la apariencia nos separa del mundo de nuestros antepasados se disipa… Entrar en conexión con nuestro linaje, con nuestros queridos muertos es entrar en comunicación con las memorias de las que estamos tejidas. Hay veces en que no tenemos la visión para reconocer las fibras que urden nuestro ropaje, y de esta forma vamos arrastrando nuestras faldas, en vez de agarrarlas con firmeza y orgullo, evitando los tropiezos, o comprendiéndolos e integrándolos en armonía.


La noche de Samhain nos regala un momento mágico para entrar en contacto con estas memorias. Abre tu Corazón, alinea tu mente al Amor y escucha… La Lunita Nueva en el Cielo es auspiciosa para este viaje a lo profundo…

Feliz Samhain  Feliz Invierno  Feliz Lunita Nueva! 



jueves, 3 de abril de 2014

Tejida Sagrada

En el silencio de la noche, mientras reposo mi cuerpo en el manto eterno de mi sueño, veo aparecer una Luz. Titilante y Serena a la vez, su radiante magia me cubre invitándome a soltar. Sé que estoy despierta, pero la sutileza de un aroma añejo me embriaga el Alma … Es Entonces cuando extasiada por el instante abro los ojos y la veo a Ella.

Lo primero que me acoge es su Sonrisa Divina. Sus pómulos luminosos sobresalen como sagradas montañas blancas, sostenedoras de la Vida. Ella me mira con la Dulzura de los Tiempos Eternos. En la pequeña circunsferencia  que dibuja su boca dispuesta al amor, un soplo emana directamente hacia mi Corazón, y es entonces cuando siento cómo me van naciendo alas, y cómo me elevo en un torbellino luminoso, cómo mi cuerpo se disuelve en espirales fulgurantes, cómo voy volviéndome la Esencia en medio de una fiesta de fractales de amoroso color…

Chispas de calidez abrazan mi espíritu, Vengo de las estrellas, vengo de la Luna… El Templo de la Diosa me Habita en lo que Soy… Destello de Mirada Divina, Ella me eclipsa en sus ojos. 
Estoy tejida de las hebras de su Corazón. Mi Cuerpo es su vestido, de él cuelgan Lunas como estrellas del Firmamento...

Y sigo creciendo, y sigo elevándome y de mis manos  nacen planetas, y gotas de río nacen en mis ojos, porque voy viendo y voy amando la trama perfecta que somos, la Vida infinita que nos envuelve, el Mandala Sagrado que nos sostiene… 

Sólo soy el respiro eterno de la existencia… los velos se disuelven mientras Ella reúne en sus Manos abiertas, La Vida y la Muerte de Todo cuanto Es. 

Me dejo ahora abrazar por su silencio sembrado de cometas, su silencio que canta todos los poemas… Me abrigo entonces en Su Corazón Divino, y  es así como comprendo lo que es  la Eternidad.  Su mano me dibuja. El fino hilo sagrado de su PrEsencia teje mi nombre. Me vuelvo semilla Cósmica y las mareas responden a mis sueños, y mis pequeños pasos van dibujando estelas por donde la Luz se refracta en miles de arcoíris… 

Sí. Hilos Eternos Somos. El Tejido alucinante del Universo. Pero en medio de esta fiesta de colores y de magia, Hay un Hilo que me teje hacia la Tierra. Un solo y sagrado hilo, que se desangra hacia abajo… Es tan Grande su Fuerza, es tan profundo su llamado, que no me resisto a viajar en su Misterio, y entonces me sumerjo en su ruta silente… voy navegando en sus recodos, nudo a nudo, voy atravesando la amalgama de su destino… y voy en un río, Hilo de Agua, Hilo de Sangre que me entibia el pecho, fibra ardiente que me abre, que me devora, que me traga hacia lo oscuro, hacia lo profundo, hacia la noche de mi misma y del universo. Esta fibra me teje hacia adentro, una senda dibuja hacia mi Templo...

Y veo. Es en mi Útero donde se re-vela el Misterio. Las compuertas de las Memorias se abren a su océano. Río Rojo atravesando las Eras… desde el Comienzo. Fluyendo. Llegando y Na-Siendo. Todas mis Madres están Ahí. Y me veo. Espejos Circulares descubren la Abuela que me acuna, la Madre que me llora, la hija que me gime en cada encarnación. Soy la Sangre y la Leche que me nutre, la Luna que me Contempla Corazón adentro, mar adentro, en las aguas eternas de mi latir. Platinados susurros van nutriendo mis mareas. Tierra Húmeda me va cubriendo el cuerpo, raíces nocturnas me seducen, elixires cristalinos me acarician  y es como brota de mi la Vida, desde el Corazón mismo de Gaia.


Así, tejida hacia adentro y hacia afuera, hacia arriba y hacia abajo, me descubro otra vez despierta, en el lecho de mi Ahora, Conteniendo y Contenida, en la Esfera Eterna de la Vida, en el Manto Divino de la Diosa.

La bella Imagen es de la Artista Eva Ruiz

***

(c)Raquel Bórquez

martes, 18 de marzo de 2014

Son de Tambora

A veces siento que estoy volviendo, cuando parece que recién me voy. 
Y La Luna Brilla, y vengo de darle vueltas a su Sagrado Corazón... 
Círculos se dibujan en mi horizonte que cambió su línea por una eterna curva...
Y me vuelvo al Silencio de ese Devenir... 
Y me eclipso en ese pozo de Luz plateada que me abisma hacia mí misma, 
que me sumerge hacia el ruedo de mi falda, 
que gira en espirales hacia adentro... 
y voy siendo, y voy naciendo, y voy muriendo sí, en la Luna... 

Alumbrando con todo su esplendor la inconmensurable oscuridad de mi noche, 
ella se yergue en mis pupilas encandilándolo todo... 
Y es entonces cuando puedo ver aquello que la Luz del día oculta en sus velos cálidos y benévolos.... 
In-visibles a los caprichos de mi Yo,
la Noche me sorprende deambulando en sus aromas... 
Sí. Camino en esferas que se aprietan y se abren al ritmo sacro de mi Corazón... 
Es una tambora blanca la que me suena,
es un aliento azul el que me canta, 
y es entonces  cuando no hace falta mirar hacia arriba, 
porque el firmamento está todo ahí, 
tejido en mi pecho, 
con su Luna Fulgurante de Medicina Ancestral, que alumbra, Oh Diosa! Incluso lo que no quiero Ver... 
y por eso agradezco, una vez más, 
tu anchura perfecta, 
tu circunsferencia sagrada que ha venido, 
como el primer día,
a despertarme del Gran Sueño...  





 La bella Imagen es de Amanda Clark

viernes, 6 de diciembre de 2013

Mujer-Es que Soy


Tantas niñas viven en mí…

Ha pasado el Tiempo. En mi humanidad me descubro otra… más grande, más profunda…

Pero tantas niñas viven en mí… Las veo asomar silenciosas. En una esquinita de mi Corazón susurran su sentir. Hay una que tiembla todavía cuando el cielo se entristece, hay otra que se enfada cuando el horizonte se disuelve en su mirada, y hay una que se burla lejana, con una risa ingenua, cuando me siento y contemplo su presencia esquiva…

Hay otra que revolotea como mariposa cuando una Flor me sorprende en el Camino, hay otra que se estrecha en mi piel cuando se siente sola y no quiere mirar que la noche ha caído, y hay una que traviesa me sonríe y me invita a jugar descalza, decidida a treparse en las estrellas y los sueños…
A veces, todas me miran. Alineadas a la altura de mis ojos, me asaltan y me preguntan dónde, cuándo, para qué…

A veces… sólo a veces las busco…  y disueltas en la penumbra de mi ceguera, me esconden todos los rastros, y me quedo desnuda, contemplando mi vientre que crece, mis manos que se arrugan, tiernamente, sutilmente, dibujándose en ellas la travesía del tiempo, de este tiempo que me ha sido  dado para la Vida, de este tiempo en que me reparto entre la que era y la que soy, entre todas las mujeres que me habitan, entre todas las abuelas que seré…

Pero sigo siendo niña. Y sigue siendo mi mirada el espejo donde se eclipsan todas las vidas y todos los tiempos.  Sigue mi cuerpo repartiéndose y a veces me estremece descubrirme tan anciana llevando el peso de las eras en mis huesos, saboreando el silencio como quien saborea primaveras… Y esa anciana también me mira, esa anciana solo es una, y me mira y me mira…  y su mirada es un pozo profundo, un abismo irresistible, un precipicio hondo que se arremolina sumergiéndolo todo… y cuando sus aguas emergen es cuando todas mis niñas se abalanzan, y la abuela las abraza y las acoge en sus Corazón Eterno, y las niñas lloran y las niñas ríen, y se estremecen y a veces gimen de placer… Otras veces simplemente se acurrucan y se dejan querer, y la anciana entonces sólo sonríe y en su sonrisa el universo despliega su canto y su misterio y es entonces cuando anciana y niña se disuelven, y me quedo otra vez desnuda, frente a la que Soy, Oh Mujer! De carne blanda, de carne viva, de cuerpo que vibra y a veces duele, de cuerpo que goza, de cuerpo que sostiene toda, aboslutamente toda la existencia…

Y aun cuando mi Alma Vieja me cobija con la paciencia de Todos los cielos. Soy esta Mujer, y soy Humana, y a veces busco y no encuentro. Y a  veces no busco y Todo se me revela.

Amo Ser ese Misterio. Amo la Vida que me atraviesa. Honro esta existencia Humana en este cuerpo pequeño que cobija lo imperecedero. Y amo saber que más allá de las formas, Sí, Somo Uno, Y Somos Infinitos… pero aquí y ahora, Soy esa mujer que escogí  Ser, y con todas mis niñas y mi abuela, sigo caminando, sigo temblando y riendo, sigo sorprendiéndome del Sol Divino que nos besa, y aunque todavía nos duela la frialdad dela piedra, no descarto ni una sola, pues son mi bendito camino.

Chaltumay!


Raquel Bórquez


La preciosa imagen es de Holly Sierra