martes, 13 de noviembre de 2012

Plumas de ángel



                                                         Para Joaquín, venido de las estrellas…



Sutil brisa que acaricia el terciopelo de mi Alma…
Pequeño susurro azulado que sigiloso atisbas mi corazón…

He visto tus ojos grandes brillar con la verdad del silencio, 
He visto los soles que te nacen de esas pupilas que,
viajeras de la noche y sus secretos, 
destellan los sueños de un príncipe 
recién llegado al mundo, 
de un Señor que descalzo y liviano,
posa sus recuerdos en los misterios de la primera flor.

Oh bella melodía del silencio sagrado!
Cuando sonríes la vida segrega mariposas,
Cuando sonríes el amor destella prístinas flores,
Cuando sonríes una suave caricia abraza al mundo, 
Y el cielo brilla con color de primavera…

Bello ser que miras desde lejos,
Desde esa distancia que no existe para tu corazón alado…
Bello silbido de un pozo de estrellas,
Son tus aguas ese dulce néctar  
Que vino un día a inundar mi corazón…

Oh! Bendita Alma de las estrellas,
Aun recuerdo que me regalaste un milagro…
Aquella mañana de la Vida,
Cuando el Sol despuntaba en el horizonte de mi noche,
Llegaste con la Luz…
Tímido y sereno te volviste a mi Corazón,
y en la nobleza de tus manos blancas 
brillaba un tesoro que ofrendaste a mi Alma…

Oh, Amado Ser venido de Dios, 
cada respiro tuyo bendice la Vida,
Luminoso, servil, cristalino…
Tu pulso guarda secretos sagrados…

Amado ser venido de lejos,
Que el Amor Infinito guarde tus pasos.
Esas huellas que dibujan un mundo soñado
Resplandecen en mi corazón…
Jamás olvidaré la magia 
Que tu silencio canta desde las esferas de la Luz…
Es un Honor, bendito ángel,
Atesorar una de tus plumas… 
                       




La bella imagen es de la artista Nadezhda Sokolova

lunes, 5 de noviembre de 2012

Una Tierra de Luz


Amad@s herman@s… 

Amados seres que tienen la dicha de caminar Hoy en este Planeta Sagrado.

Es mi Alma la que les escribe. Es mi Alma la que llena de amor y luz brota en estas palabras.

También es cierto que mi yo recibe su verdad como la verdad más grande que pueda sostener, porque ella y yo vamos juntas, porque ella besa esta Tierra a través de mis labios, y porque a través de mis pasos va acariciando la suave hierba que crece hacia la Luz…

Amad@s herman@s… Hoy no es ni poesía, ni canto, ni cuento. Es el llamado de mi corazón, es esa verdad que me mueve y que me inspira… esa verdad que estoy segura compartimos, porque al igual que yo, ustedes también han escogido honrar con su presencia esta Tierra, este Planeta azul y verde que nos complace de maravillas, que nos llena de milagros, que nos cobija desde hace tanto tiempo ya… Este planeta que ya se viste de Arco Iris, este planeta que somos, en lo profundo del Corazón.

Sé que por largo tiempo hemos olvidado que no hay distancia que nos separe de esta Tierra, sé que por mucho tiempo ya, hemos olvidado que su Corazón y el nuestros palpita al unísono, y que todo aquello que hacemos a Nuestra Amada Madre nos lo hacemos a nosotros mismos, y lo que nos damos, se lo damos…

Hace unos días he sentido un llamado muy grande a pulsar desde el Amor este recuerdo. Sé que juntos podemos brindar ese Amor y ese Respeto que hace mucho nos hemos negado. Al hacerlo con nosotros mismos, lo hemos hecho con nuestra Madre Tierra. Digo Madre porque hemos nacido de su Corazón, porque Todo, absolutamente Todo lo que nos sostiene hoy como especie proviene de su Amor Puro. 

Mucho del daño que le hemos provocado a ella  y que nos vamos provocando a nosotros mismos proviene de su olvido. Todas aquellas cosas que nuestra civilización ha perseguido, todos aquellos logros que llenan de Gloria al hombre moderno, ha sido a costa de su sacrificio. 

Pero ella no ha muerto ni morirá… Su amor infinito nos salva. Mucho de este dolor infligido a la Madre Tierra no nace de la mala voluntad. No todos los hombres dañan la Tierra a sabiendas de su consecuencia. Porque estoy segura que si por un solo instante un Ser humano pudiera Sentir el Alma de nuestro Planeta, Si por tan sólo un segundo pudiera experimentar la profunda humildad y entrega de Gaia, si tan sólo por una fracción de ese segundo los hombres y mujeres de este planeta re-cordaran que Somos Uno, bastaría ese segundo para Sanar Todo ese Daño que por largo tiempo hemos causado, y sería suficiente para volver a cultivar una relación amorosa y profunda con esa Tierra llena de dones.

Creo humildemente que un primer paso hacia esta nueva relación, hacia esta nueva forma de vincularnos con la Madre Tierra, hacia esa nueva forma de comunicarnos entre nosotros, es perdonarnos a nosotros mismos y no juzgar a aquellos hermanos que aun no despiertan a su Verdad. Es el amor más profundo el que, expandido desde el Corazón, puede acoger toda esa inconciencia que aun pesa en los hombros del ser humano. Y es ese Amor el que nos permitirá gestar esa Nueva Tierra, cuyo pulso todos llevamos en el Corazón.

Sé que es doloroso sentir el daño que hemos causado a Nuestra Madre Tierra. Una vez que hemos despertado, es más doloroso aún ver cómo miles de hombres siguen arrasando con su cuerpo luminoso, cómo sin darnos cuenta hemos ido tomando todo de ella, olvidando siquiera agradecer…

Pero herman@s mí@s, herman@s de mi Alma… ¿Cómo canalizamos ese dolor? ¿Cómo lo limpiamos? ¿Cómo lo sanamos?... Créanme, hermanit@s amad@s, que si lo hacemos a través de la crítica, la rabia y el enojo, sólo estaremos contribuyendo a hacer aun más denso ese dolor… Al juzgarnos herman@s mí@s nos encerramos en una prisión que sólo nos dejará más solos…  

Seamos entonces como la Madre Tierra, gentil, acogedora, infinitamente amorosa. Aquellas lágrimas que nacen del dolor que nos produce tomar conciencia, en verdad son lágrimas de Amor, porque nacen del darse cuenta, porque nacen del re-cordar nuestra verdad más profunda…  

Que nuestras lágrimas de Amor sean entonces la savia que alimenta una Nueva Tierra. Que nuestras lágrimas sean un río destinado a fluir eternamente acariciando con sus aguas las tierras más áridas de nuestro propio corazón. Que nuestras lágrimas sean como la lluvia que alimenta la tierra para que Infinitas flores puedan abrirse a la Luz. 

Bell@s herman@s que hoy día leen estas palabras, sé que un día escogieron venir a esta Tierra para realizar su propósito de Luz. En ese camino hacia la divinidad que Somos hemos sido sostenidos era tras era por el Corazón de este Planeta, y hoy otro círculo nos remite al principio, cuando honrábamos cada manifestación de la vida como manifestación misma de la divinidad…  

Hoy podemos comenzar a vivir otra vez ese regalo. Hoy se nos ofrenda otra vez ese placer inconmensurable de realizarnos mediante el Amor, hoy somos bendecidos infinitamente con la oportunidad de mirar la Vida desde los cristales del Alma… Dichosos son nuestros corazones, pilares y sostenedores de la Luz…

Nuestros bosques ya sienten la promesa de su renacer. Ellos nos cobijan y nos agradecen. Los animales comienzan poco a poco a re-conocer el nuevo pulso de nuestro corazón… poco a poco comienzan a confiar otra vez en nosotros, porque nosotros mismos hemos vuelto a confiar en la Sabiduría Interior.

Amad@s herman@s del camino, he podido sentir la infinita bondad y la infinita gratitud de la Vida que palpita en cada hoja, en cada árbol, en cada flor. He podido sentir el amor de las aguas fluyendo, de las aves volando. He sentido la Gratitud del viento y el abrazo del Gran Sol. He sentido también el Amor de la Lluvia limpiando y suavizando nuestras durezas, nuestras heridas…

Todos somos un solo Corazón que poco a poco comienza a recordar ese abrazo sagrado que nos sostiene… Y cada gesto nuestro que nace del Amor, el más pequeño siquiera es infinitamente celebrado desde todas las Dimensiones del Universo… Miles de Seres puros en su Bondad nos alumbran el camino, nos inspiran en su Amor, y honran cada uno de aquellos pasos, cada uno de aquellos sentimientos, cada pequeño pensamiento que pulsamos desde la Verdad más profunda de nuestra Alma, desde la pureza resplandeciente de nuestra esencia divina, desde nuestro corazón que íntimamente teje redes que nos unen desde siempre…

Mi alma se encuentra agradecida y les honra a cada Uno, les bendice y les agradece infinitamente su presencia perfecta en este Planeta.  Ella sabe que no ha sido fácil, pero sabe también que jamás equivocaremos el camino, ella sabe y siente cómo la Tierra Toda resplandecerá nuevamente en cada uno de nuestros corazones. La Nueva Tierra es esa semilla que ya está germinando en nuestro interior… que sea nuestro Amor el que la Riegue… cada uno de nosotros es una Flor Única y Preciosa, y juntos somos el Jardín más bello y luminoso que podamos imaginar…


Gratitud hermanit@s amad@s…  Que el Amor y la compasión guíen nuestros pasos.

Gracias Madre… en Ti Soy…